Chapter 50
Another awakening with his Little Light and Gerard couldn’t feel happier. The warmth of the girl’s fragile body reaches his
heart. The aroma that she gives off is unique and makes him eat her with kisses at this precise moment.
She is on her back, with her butt against her abdomen and Gerard takes advantage of that to put his hand on the girl’s belly, to
give warmth and security to that baby... his baby.
Because it is clear that this baby will not belong to anyone else.
He stays like that for a few more seconds, until she stirs a little. Luz feels the warmth of Gerard’s hand in her son’s home, she
tries to get comfortable to see the man’s face, but she repents at the same moment that she feels something hard against her
buttocks .
She moves away from Gerard, sits on the bed, blushing and not wanting to see his face.
-I’m sorry, but it’s... unavoidable to be like this in the mornings.
-At least it’s not for me – she tells him running away from the bed to hide in the bathroom and Gerard seems innocent to him –
– How did you get pregnant, my little Luz? -she wonders looking at the ceiling-
When she goes out, she’s still in her pajamas and that’s because today they won’t leave the hotel, they’ll rest and maybe go
down to the pool. Charlize has no intention of waking up, so Gerard orders breakfast for the room, leaves Luz a tender kiss and
goes to take a shower.
Leaving the bathroom, she is only wearing a T-shirt and shorts that reveal her magnificent body, which is why Luz involuntarily
closes her legs while lying on the bed reading.
-Dan needs to talk to me, I’ll be outside talking to him.
-I tell the princess, if she wakes up in this time.
Admiring that view of Gerard’s butt turns Luz on, stirs her thoughts and continues her reading.
-Te tengo noticias. Hay un infiltrado de Bowman en la empresa de Williams, un chico llamado Rickon y adivina qué... es su hijo.
– Maldito... ¿sabemos si fue él quien drogó a la chica?
– Puede ser, como también puede ser que le vendiera la droga a alguien más. Estamos tratando de sacar más información – un
suspiro de Dan le dice a Gerard que esto es más complejo -. Gerard, esto e s muy grande, Alfa está tratando de meter a uno o
dos más en esto, porque es algo mucho más horrible de lo que vemos.
“Lo peor de todo, es que al parecer este hijo de... Bowman, es mucho más desgraciado que el padre.
-Al menos ya sabemos que si le cortamos la cabeza al bastardo ese, habremos terminado un pequeño imperio de la mafia en
Nueva York – Gerard mira la vista que el hotel le ofrece esa mañana y suspira con resignación -. No se sabe nada de la chica.
– No. Mira, sabemos que era camarera, desde esa fecha se han retirado unas quince. Alfa está tratando de conseguir esa lista,
porque todo se está haciendo por debajo de la mesa, ese Rafael no quiere
cooperar en nada y me temo que pueda estar involucrado con el crimen.
– Ya lo veremos, cualquier cosa que sepas, por mínima que sea, me lo informas... Por cierto, ¿cómo van las cosas en la
oficina?
-Digamos que es como aquella calma antes de la tormenta. Darcy me tiene con ambos ojos pegados sobre ella, porque está
demasiado tranquila. Pensé que al menos se desquitaría con los chicos de la oficina, pero sigue con su humor de siempre.
-Bien, cualquier acción de Darcy, me lo informas, estoy decidido a sacarla de donde sea que estropee mi vida.
-Te felicito, Gerard, nunca es tarde para tomar las buenas decisiones. Disfruta tus vacaciones con tus mujeres, ya me contarás
qué avances has tenido.
Corta la llamada y regresa al interior, donde Luz está sentada con Charlize, peinándola con ternura mientras le canta una de las
canciones favoritas de la niña. A Gerard se le vuelven pesados los pasos ys e queda apoyado en el marco de la puerta,
observando a sus mujeres sonreír y ser felices.
SOT
tendrá su hijo.
A través del espejo, las miradas se encuentran y los ojos de Luz le inyectan vitalidad, cuando se apartan de los suyos, toma el
teléfono y decide preparar una sorpresa para Luz. algo con lo que no se podrá negar a ser su novia.
El día pasa tranquilo, entre risas, piscina, enseñar a nadar a Charlize y practicar algo de lectura. Cuando regresan a la
habitación para ducharse y cambiarse de ropa, Gerard les pregunta si quieren cenar allí o en el restaurante.
-Yo quiero aquí – dice Charlize -. Si me da sueño, puedo lavarme los dientes de una vez y tirarme en mi linda cama.
-¿Luz?
– Por mí está bien donde la princesa y tú quieran..
-Pero quiero saber qué quieres tú – le dice Gerard acercándose a ella –
“A ti, en la cama, desnudo y sobre mí”, esa era la respuesta que a Luz le habría encantado darle, pero había menores presentes
y no es que fuera tan lanzada para ese tipo de cosas.
-Aquí está bien – le dice ella apartando la mirada antes de Gerard la descubra –
-Entonces, pediré que nos traigan la cena aquí.
Unos minutos después, cuando llega el servicio al cuarto, llegan también cinco enormes ramos de flores, rosas blancas que
huelen delicioso, y un violinista. Cuando Charlize comienza a gritar por la emoción, Luz sale de la habitación a la sala y se
queda en completo silencio.
Desde el violín comienza a salir la suave melodía de Run, de Josh Groban. Gerard se acerca a ella, le extiende la mano y la
lleva a cada uno de los ramos de rosas, que tienen una tarjeta con bella caligrafía. Luz las saca, cada tarjeta solo tiene una
palabra, las lee en voz alta.
-Luz... ¿quieres... ser... mi... novia?
Ella mira a Gerard con los ojos abiertos, aguados y de nuevo, sin dejar que el miedo la vuelva a paralizar, se lanza al vacío
porque sabe que ya tiene puesto el paracaídas.
-Si... sí quiero.
Un beso.
Muchos aplausos.
Dos corazones desbocados. 3
A pact of love sealed forever... perhaps.