Capitulo 229 En Puerto Rafe la lluvia habla parado y en el cielo aparecié un arcoiris.
La gente en la calle sacaba sus celulares para tomar fotos, “Miren, miren, hay un arcoiris, qué hermoso!” Abel expresé con sentimiento, “La seforita Carol se encarga de nuestro Miro, hasta el cielo ha dejado de llorar y ha sacado un arcoiris para celebrar. Parece que la sefiorita Carol y Miro estan destinados, hasta el cielo estd mirando.” Aspen levanté la vista para ver el arcoiris, pero no dijo nada.
No sabia si Carol y Miro tenian destino juntos, solo sabla que en ese momento se sentia bien.
Los dias nublados hablan pasado y el cielo estaba despejado.
También sacé su celular para tomar una foto y ensefiarsela a Miro en casa.
Follow on NovᴇlEnglish.nᴇtAl llegar a la entrada del complejo de Tania, Abel estaciond el carro al lado de la carretera y llamé a Carol por teléfono.
Pronto aparecié Carol, vestia un abrigo largo de color crema y botas para la nieve, no llevaba maquillaje y tenia el cabello suelto.
El viento soplaba y su cabello le tapaba los ojos.
Se levanté la mano para acomodarlo detras de la oreja, dejando ver sus orejas rojas por el frio.
No solo sus orejas estaban rojas, también su nariz lo estaba. No sabia si era su impresion o si era porque el fresaltaba su palidez, pero Aspen penso que ella se veia mas palida que antes.
Abel abrié la puerta del auto y se bajo. Carol lo y le hizo sefias con la mano para indicarle donde estaba.
Aspen se quedo sentado en el carro y encendié un cigarrillo.
No podia oir de qué hablaban, pero se veian muy animados Ella incluso sonrefa a Abel, mostrando sus dientes blancos y un par de hoyuelos.
Parecia dulce, como una mujer tierna..
Podia sonreir a Abel, a Nathan, a Enrique, a Lamberto.
Pero nunca sonreia para él.
Aspen no sabia de dénde venia su enojo, una calada fuerte al cigarrillo mientras pensaba en ello.
Follow on Novᴇl-Onlinᴇ.cᴏmPronto Abel regresé al carro. Parecia muy contento y dijo, “Hoy la sefiorita Carol preparé un montén de cosas ricas, Miro va a estar feliz.” Aspen con el rostro serio, no respondié.
Abel cerrd la puerta del auto y se gir diciendo, “Aspen, ;adivina quédijo la sefiorita Carol recién?” “Nointeresa.” “iNo tienes curiosidad? Pregunté Abel.
“iQué puede decir? Seguro estaba hablando mal de mi. Dijo Aspen con la cara atada.
Abel se quedé en silenpor un momento y luego dijo, “Te equivocas, ella no mencioné tu nombre para nada.” Aspen se quedo en silencio.
El silenabrid la puerta a la incomodidad, que habia llegado a casa.
iEso era peor que hablar mal de él! *;Por qué no mencioné mi nombre?” Pregunté Aspen, “No sé, no dijo ni una palabra. Contesté Abel.
Preguntar mas solo lo hacia sentir mas incémodo.
Capitulo 229 Abel noto que alguien él no estaba contento, asi que cambié rapidamente el tema, “La senorita Carol dijo que no ha cocinado para Miro Ultimamente porque estaba enferma. Nos pidi6 que le avisaramos a Miro que ella estaria feliz de cocinar para él siempre que él quisiera.” Aspen retir6 la mirada y mir6 hacia fuera de la ventana del auto, Carol ya no estaba a la vista Abel puso el cinturén de seguridad y arrancé el carro. Una vez en la carretera, dijo, “La verdad es que la seforita Carol es muy buena. Yo pensaba que habia dejado de cocinarle a Miro por el susto con lo de Margarita pero resulta que estaba enferma. La he visto muy demacrada hace rato, con un aspecto muy palido.” Aspen se quedo pensativo asi que por eso parecia mas blanca, era la palidez después de una larga enfermedad.
“Lleva algunas de la medicina y los ingredientes que acabamos de recibir a casa, y de paso pidele a Ivan que le prepare un caldo para llevarle.” Ordend Aspen, Abel escucho y respondié entusiasmado, “jAsi se hace! Por qué no eres siempre amable con ella? Si eres amable, ella también sera amable contigo, ino crees?” [x “iQuién ha sido amable con ella?” “Entonces por qué le envias cosas y ademas mandas que la preparen un caldo?” Aspen fruncié el cey respondié, “No quiero deberle nada.”