Capitulo 1975 Justo cuando se agaché para levantar a Alicia, fue detenido por una fuerza repentina que le agarré el hombro y lo lanzé hacia un lado.
Maximiliano fue lanzado al suelo sin preaviso.
Ante sus ojos confusos, a alguien tomar a Alicia en sus brazos y alejarse réapidamente.
Esa figura alta y fria, le resultaba inexplicablemente familiar a Maximiliano.
Petrona se levant6 apresuradamente y corrié unos pasos, pero aun asi no logré alcanzar al hombre.
Renato llegé en su coche, solo llegando a tiempo para anotar la matricula del vehiculo de Octavio.
Tocé la bocina insistentemente, pero no recibié respuesta alguna, solo cémo aquel coche se desvanecia como una sombra fugaz en la oscuridad de la noche.
Bajando la ventana, miré a Petrona, que estaba parada al lado, completamente confundida, “Era Octael de hace un momento?” Petrona lo miré de reojo y subié al coche con Nicole.
“Vamos al hospital mas cercano.” Renato fruncié el cefio, “;Qué te esta pasando?” Debido al repentino desmayo de Alicia, Nicole se asusté y encima, la repentina aparicién de ese hombre particularmente aterrador, hizo que Nicole se sintiera todavia insegura.
“Es la hermana Alicia, acaba de desmayarse.” Renato parpaded y luego a un desalifado a iene hacia ellos.
“Maldicién,” murmuré para si mismo, “;Cémo es que estaba bien hace un momento y ahora se ha desmayado?” Nicole se acurrucé en los brazos de Petrona, Ese hombre de antes, se veia muy aterrador.” Renato pisé el acelerador y sali disparado.
“iAcaso este hombre puede predecir el futuro? ;Qué esta haciendo aqui en mede la noche y justo n el momento en que Alicia se desmaya?” Al oir esto, Petrona levanté una ceja un tanto incrédula, “;Cémo sabia él que Alicia estaba aqui?” “iCémo iba a saberlo?” Renato también estaba confundido; solo habfan hablado un poco al mediodia y en ningtin momento le habia mencionado a Octaque Alicia estaba alli.
A pesar de que Renato no conducia despacio, no lograba alcanzar el coche de Octavio.
Sin embargo, lo siguid hasta el hospital mas cercano.
Maximiliano lo siguié de cerca.
Cuando llegaron, Alicia ya habia sido llevada a emergencias.
Octaestaba fuera de la sala de emergencias, con un rostro tan sombque era aterrador, Renato habia conocido a Octadurante mucho tiempo y nunca lo habia visto en ese estado.
Capitulo 1975 La mayoria de las veces era un hombre distante e indiferente, sin muchas expresiones adicionales, que rara vez dejaba entrever sus emociones, pero en este momento, su estado estaba lleno de una extrafa crueldad.
“iCémo esta Alicia?” Octaestaba parado en la puerta de la sala de emergencias, aparentemente calmado, pero todos los presentes eran muy conscientes de que bajo esa capa de calma, habia algo que estaba listo para estallar en cualquier momento.
Octalevantd lentamente la mirada, con unos ojos estrechos y frios sin un apice de calor, su mirada pasé por encima de Renato y se posé directamente sobre Maximiliano, que se acercaba a ellos.
Maximiliano detuvo sus pasos bruscamente debido a esa mirada.
Dirigié su mirada hacia la puerta de la sala de emergencias detras de Octavio.
No sabia si era su imaginacion, pero Octavio, parado en la puerta, parecia ser una barrera impenetrable, rechazando cualquier intento de acercamiento.
Follow on NovᴇlEnglish.nᴇtEstaba profundamente impactado por el ambiente que desprendia Octaen ese momento.
Fuera de la sala de emergencias, solo su lado del espaestaba inmdvil, sin palabras, en una calma que enmascaraba un entorno indescriptible.
Después de un tiempo indeterminado, la puerta de la sala de emergencias se abrié y sali un médico. Octase giré y lo miré con indiferencia.
“Es una gastroenteritis aguda, ya se le han suministrado liquidos, asi que se pondra bien.” El tono del médico indicaba que no era nada serio.
Maximiliano suspir6 aliviado.
Pero estaba un poco mas molesto.
La gastroenteritis aguda fue probablemente el resultado de pasear por el mercado nocturno esa noche.
Cuando el médico terminé de hablar, la puerta de la sala de emergencias se abrié de nuevo y dos enfermeras llevaron a Alicia afuera.
Alicia, nacida con una piel naturalmente palida, ahora lucia casi transparente con su rostro descolorido. Fruncia el cecon dolor, sus ojos estaban cerrados con fuerza, y sus labios desprovistos de color. En su frente y la punta de su nariz se podia ver una capa fina de sudor.
Octafruncié el cey se movid un tanto inquieto, agarrando la baranda de la camilla hospitalaria.
Las dos enfermeras lo miraron con desconcierto, pero él les pregunté con frialdad: “¢Le dieron algo para el dolor?” Las enfermeras asintieron, “Sl, se lo hemos administrado.” Octalevantd la mirada friamente hacia ellas, “;Creen que ella parece estar sin dolor en este momento?” Las dos enfermeras, algo inseguras, desviaron la mirada hacia el médico.
‘Se le ha dado algo para el dolor, pero no recomendamos usar analgésicos mas fuertes, ya que puedefi ser perjudiciales para el cuerpo. Pronto se sentird mucho mejor.” Octabajo la mirada hacia Alicia y finalmente solté la baranda de la camilla.
Renato, apoyado contra la pared, eché un vistazo hacia Alicia. Su delgado cuerpo no mostraba ni un apice de su energia habitual, y aunque su rostro palido segufa siendo hermoso, carecia de vitalidad: Cuando la camilla pasé junto a Maximiliano, este se acercé rapidamente, agarrando la baranda y mirando a Alicia con cierta preocupacion y culpa.
“Lo siento, Alicia, todo es culpa mia...” El cede Octase fruncié atin mas.
Mientras Maximiliano segufa a la camilla, antes de que pudiera terminar su frase, alguien agarré firmemente el cuello de su camisa y lo arrastré con fuerza hacia la salida del hospital.
No tuvo margen para resistirse.
Renato, alarmado, observé cémo Octaarrastraba a Maximiliano sin contemplaciones. Al darse cuenta del peligro que eso representaba, maldijo en voz baja y se apresuré a seguirlos.
“Diablos. Octavio, {qué estas haciendo?” (Habia perdido la razén? Maximiliano, como Unico heredero de la familia Sagel de la Ciudad P, tenia innumerables conexiones en los negocios de materiales de construccién. Aunque no tuvieran tratos comerciales, si le pasaba algo grave a Maximiliano, la familia Sagel no lo dejaria pasar facilmente.
El siempre habia sido una persona que usaba su inteligencia en lugar de la fuerza fisica. Sus métodos eran efectivos y no dejaban preocupaciones futuras.
Pero ahora, estaba a punto de atraer problemas innecesarios a su vida por golpear a una persona.
En ese momento, las palabras de Renato apenas llegaron a los oidos de Octavio, que ya habia lanzado. un puiietazo a Maximiliano, arrojandolo por las escaleras de la entrada del hospital.
Maximiliano se arrodillé tambaleédndose en el suelo, con una apariencia lamentable.
Pero Octavio, con unos pocos pasos rapidos, se acercé a él, y una vez mas agarré nuevamente su camisa para levantarlo del suelo.
“Por la mafiana la sacaste completamente sana de la residencia de la familia Valdivia, y esta noche ya se encuentra en la sala de emergencias. Pensé que eras mas capaz de hacerlo.” Los labios de Maximiliano sentian un dolor desgarrador mientras miraba friamente a Octavio, “Es verdad, es culpa mia que ella haya terminado en el hospital y debo disculpapor ello, pero también es u asunto entre Alicia y yo...” Antes de que pudiera terminar, Octafruncié ain mas el cey golped a Maximiliano de nuevo.
“Maldita sea, Octavio, estas loco!” Renato no podia creer que le habia propinado otro golpe. Se quedé aténito por un momento, luego traté de separar a Maximiliano de Octavio.
Pero Octano mostré ninguna intencién de soltarlo.
Renato aplicé mucha fuerza pero no pudo liberar a Maximiliano.
Frustrado, se volvié hacia Octay, con una sola mirada, se quedé perplejo.
Capitulo 1975 Viendo a Octade cerca, su rostro irradiaba una intensa ferocidad. Las mangas de su camisa se habian deslizado hacia arriba por la pelea, revelando las venas protuberantes en sus mufiecas, tensas como si fueran a romperse en cualquier momento.
Este hombre parecia estar al borde de cometer un asesinato.
Renato ignord la fuerza externa de Octay, con un movimiento répido, arrastré a Maximiliano frente a él. Sus ojos brillaban con una malicia gélida y su voz profunda resonaban como una capa de hielo bajo un glaciar espeso.
“iHas pensado bien a quién intentas robarle la chica? ;Eh?“.
Fue entonces cuando Maximiliano entendié por qué Octalo golpeaba sin misericordia.
Sonrié torcidamente, tirando de la herida en su labio.
“Aunque quisiera robarle la chica a alguien, seria porquehan dado la oportunidad. No importa cuanto peso tenga, mientras pueda darle a ella algo mas de lo que otros le ofrecen, por muy poco que sea, tengo el doble de posibilidades de éxito.” Dicho esto, Maximiliano dejé de dar rodeos y hablé directamente: “Si puedes, continta despreciando ignorandome. No creo que su corazon sea una fortaleza impenetrable, que tu no puedas herir o que yo no pueda entrar.” Octase quedd perplejo por un momento, sus ojos se estrecharon bruscamente y, al levantar la mano, a varios acompaiiado por un viento cortante, Maximiliano cayé pesadamente en el suelo de cem la mano, metros de distancia.
Renato también fue arrastrado por la fuerza, tropezando varias veces antes de estabilizarse, observando impotente cémo Maximiliano echaba lefia al fuego, no se preocupé por como lo habian golpeado y réapidamente se adelantd para detener a Octaque se disponia a ir hacia él.
“iYa es suficiente, has armado suficiente escandalo! ;Octavio, donde tienes la cabeza? ;Has pensado en como explicarle esto a Alicia cuando se despierte?” Octase detuvo y bajé la mirada hacia Renato, “;Explicar?” Renato se mordi la lengua, sintiendo que cualquier cosa que dijera no servirfa de algo.
No dijo nada, temiendo que si siguiera hablando, él seria el préximo en recibir un golpe.
“De hecho, deberias explicarlo. El tenia buenas intenciones al llevarla a pasear para despejarse, y todos saben que terminar en el hospital fue un imprevisto. ;Crees que Alicia le guardara te culpara?” La que estaba hablando era Petrona, que estaba en los escalones, con una voz serena. “Mas que resentir a alguien que solo queria hacerla feliz, creo que el mas imperdonable es el verdadero causante de su infelicidad.” Octaempujé a Renato a un lado y se volvié para mirar a Petrona con una mirada fria.
Petrona no mostré ni un &pice de temor, simplemente sonrié con ironfa. “La persona esta alin inconsciente en la cama del hospital, y aqui tienen a un ‘agresor’ directo y uno indirecto discutiendo sin cesar ;De qué sirve eso?" “Si no estas satisfecho, matalo a golpes, pero cuando recuperes la razén, vuelve a cuidar de ella.” Viendo que Renato respiraba aliviado, Petrona retiré su mirada y subié al coche.
“Ya no tienes nada que hacer aqui, estd amaneciendo y necesitas llevarnos de vuelta al hotel a descansar.” Renato no tenia intencién de quedarse, Octaestaba completamente loco esa noche.
El conductor de la familia Sagel habia aparcado el coche y corrié hacia ellos para ayudar a levantar a Maximiliano del suelo.
Maximiliano estaba bastante herido, con la nariz y el rostro hinchados, el larasgado y su cuerpo lleno de polvo también tenia heridas provocadas por los golpes y caidas.
El conductor insistié en llevar a Maximiliano al hospital para que lo examinaran.
Nicole, evitando a Octavio, se acercé a Renato con cierto temor y agarré su brazo.
Petrona observé a Maximiliano entrar al hospital y luego a Octavio.
“De hecho, Maximiliano no estaba equivocado en lo Ultimo que dijo.” Ella empujé a Renato y todos se dirigieron hacia el coche.
Con el caos disminuyendo, ‘{Maximiliano tenia razén? Sobre qué? Octase permanecié inmévil, todavia con los pufios cerrados.
Follow on Novᴇl-Onlinᴇ.cᴏmiQuerfa entrar en el corazén de Alicia? Apoyado en una columna fuera del hospital, Octasacé un cigarrillo, lo encendié y el humo se disipé misteriosamente bajo la tenue luz...
(Realmente pensaba entrar en el corazén de Alicia? Renato maldijo durante todo el camino de regreso al hotel, y al bajar del coche y entrar, todavia se sentia insatisfecho.
“Maldita sea, ¢no decia que habfan terminado? jAhora esta celoso hasta el punto de casi matar a alguien! Incluso yo casimeto en problemas por su culpa, ese loco...” Petrona siempre directa, respondié: “;Estéas seguro de que él dijo que queria terminar? Si no lo dijo, Renato, realmente te mereces una paliza“.
Renato mordid su lay paso el teléfono a Petrona, “Crees que inventarfa algo asi sin ninguna razén?” Alicia eché un vistazo al historial de conversacion entre él y Octavio.
Renato dijo que estaban en mede una ruptura, y Octarealmente no lo nego.
Pero tampoco lo confirmé.
Ella fruncié el cefio, “Noesperaba que Octafuera alguien tan indeciso y ambiguo”.
Renato pensé que habia escuchado mal, “;Qué?” Petrona esbozé una sonrisa forzada al ver una notificacién de un gusta” en el estado de Renato y sin pensarlo, lo pulsé.
“No estd claro si le gusta o no. Parece querer aceptar la ruptura pero no se atreve a admitirlo. ; Qué le esta pasando? Esta atrapado en mede algo, indeciso?” Capitulo 1975 Renato tenia muchos amigos con quienes pasar el rato, y recibié un montén de reacciones y comentarios en su perfil.
Petrona abri6 la imagen que habia publicado en su perfil, aunque la calidad era pésima, como si fuera arte abstracto, todavia se podia distinguir que bajo la débil luz de un farol, habia dos figuras casi juntas.
Alicia llevaba puesta la chaqueta de un hombre, y ambos se inclinaban juntos hacia la camara en una proximidad inevitable.
Arqued una ceja, se morel lay pasé el teléfono a Renato.
“No sé si deberfa golpearte o elogiarte”.
Renato no entendia a qué se referia hasta que bajé su mirada y la imagen en el teléfono que habia abierto Petrona. La miré durante unos segundos y murmuré un confundido “;Eh?“, acercando mas el teléfono para ver mejor.
Después de un rato, exclamé un “jCarajo!” “;Cuéando los capturé en la foto?” Petrona se froté el entrecejo.
No sabia qué pensar de él.
El era el culpable.
Renato también se cuenta, chasqueé la lengua, “No es de extrafiar que él encontrara este lugar de (No queria terminar la relacién? Qué demonios le pasa? repente, jes por esto! Pero no tiene sentido.9 iJoder, ya no lo entiendo! jEsté loco!” Petrona no dijo nada mas.
£Quién sabia? Pero alguien como Octavio, si seguia de igual manera, incluso si no estaba loco en este momento, terminaria estandolo.
Octaestaba sentado al borde de la cama, mirando a Alicia, quien reposaba en silencio, su palida cara mostraba su enfermedad.
Lisandro la habia cuidado muy bien. El la habia visto en sus momentos mas dificiles, que solo fueron cuando se lastimd el talon la primera vez que usé tacones altos, causandole ampollas.
Pero ese nivel de dolor, que habia hecho que su rostro palideciera como el papel, no se comparaba a la situacién actual.
Donde ni siquiera sabia como seria cuando despertara.
Extendi6 la mano para apartar un mechon de cabello de su mejilla, su rostro sereno y dormido no mostraba el dolor de cuando la habian sacado de emergencias.
La inquietud que no habia podido calmar completamente con un cigarrillo, ahora se calmala sorprendentemente al ver esa cara tranquila y dormida.
Antes, la habia visto ser caprichosa muchas veces, un poco de dolor provocaba una escena como si fuera a perder memundo.
Pero ahora, mas que nunca, casi preferia que ella retomara su comportamiento caprichoso y desenfrenado de antes, mostrando cuan triste y afligida estaba.