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Clara jadeaba ante la sensación que recorría su cuerpo y recogió sus piernas doblándola sobre su estómago para intentar
tranquilizarse. Podía aun sentir la lengua del lobo lamiendo ahora sus tobillos, sus muslos para volver a bajar y lamer su sexo
palpitante y sensible. -Ah, espera- esta vez ella se obligó a moverse para retroceder y puso una mano sobre su sexo notando el
estado de este y tenía que decir que también le dolía. Ethan había abusado de él con su lengua como había querido. El lobo
gruñó ante la resistencia de ella. -Me duele «lobo imbécil» lo último lo pensó. Había estado en las sombras, pero tenía una idea
de todo lo ocurrido y era lo bastante inteligente como para no provocar de más a un macho molesto como estaba ahora su
pareja- Mira. Ella se sentó alejada ahora de él y abrió las piernas. Retiró la mano dejando a la vista todo su sexo rojo y sensible
donde hasta el aire la estremecía.
Ethan entrecerró sus ojos amarillos y se acercó a ella. Clara cerró las piernas otra vez poniendo su mano en esa zona entre sus
muslos en caso de que quisiera lamerla de nuevo. – Vas a romper mi piel de ahí- ella se quejó, pero el macho había tenido esa
intención – Ya asumí mi castigo, si sigues me harás daño-probó fuerza con él. No dejaría que destruyera su cuerpo solo porque
estaba molesto. Ethan se detuvo en el lugar mirándola y pareció vacilar. En eso escucharon como las ramas se rompían cerca
de ellos y un olor familiar les llegó. De entre los árboles el cuerpo de pelaje negro brillante de Dixon se hizo presente. El cuerpo
de Ethan se tensó ante su presencia. Y Clara supo que debía hacer algo porque por el estado de esos dos lobos podrían
terminar peleando de nuevo y uno de ellos ya había resultado herido antes. Así que espero que el alfa se acercara sigiloso
como lo estaba haciendo y comenzó a dejar salir sus feromonas de forma discreta. Quería que ellos se fueran relajando en vez
de que se estimulara en sobre medida con su olor. Y pareció funcionar cuando vio que el pelaje dorado del lobo junto a ella dejó
de crisparse. Dixon por su parte no se detuvo hasta estar al otro lado de ella y la examinó de pies a cabeza donde sus orbes
dorados se detuvieron en donde ella tenía su mano. Gritó su cabeza y le gruñó a Ethan aunque este no se intimidó en absoluto.
-La estaba castigando- dijo como si eso fuera lo más normal – Salió sin permiso, se puso en peligro. Tenía que enseñarle que
había hecho mal. -Me trató como si yo fuera una cachorra que necesita correctivo – Clara se quejó con una mueca en su rostro
indignada de la forma en que había sido tratado, por supuesto que su parte más débil, Ella le hubiera pateado el hocico para
que no dejara su sexo en ese estado tan
Dixon gruñó primero a su hermano y después a ella.
¿Qué? Es la verdad – Clara alzó los hombros.
Y él tiene razón ¿Por qué no fuiste con alguien? ¿Por qué fuiste sola? ¿Hubieras esperado al menos que alguno de nosotros
pudiera ir contigo?- iba alzando su tono de voz a cada palabra
Casi no te encontramos a menos que hubiéramos tenido un lazo entre nosotros,
Cuando terminó el lobo jadeaba. Clara escuchó cada una de sus palabras y tenía que reconocer que ellos tenían razón, aunque
ella había tenido la situación bajo control hasta que la otra Clara le había dado la gana de salir a la luz. Ahí era cuando todo se
había ido al demonio. Pero había una cosa que ella sabía muy bien. Tenía que hacer algo para intentar calmar a Dixon o su
cuerpo tendría el doble de castigo. Ellos dos estaban en sintonía.
Así que hizo lo más adecuado en ese momento dado que ya conocía como podía domarlos de alguna forma. Alargó su mano y
acarició el pelaje del pecho del lobo en una caricia suave y tentadora
-Lo siento. No lo volverá a hacer – por naturaleza si ella mostraba algo de sumisión los machos cederían a lo que ella quisiese,
así que aprovecharía eso. Desplazó su mano para tocar el costado tenso del rostro del animal dejando salir sus feromonas un
poco más centradas en él. Dixon ahora era el más peligroso.
-Quita la mano – le dijo con un tono grave y Clara pensó que se refería a la que lo estaba tocando, pero él le gruñó cuando lo
hizo y por lo visto se había equivocado.
Oh, él quería ver su estado actual. Verificando que Ethan estaba quieto sin hacer nada, abrió las piernas y retiró la mano para
mostrarle.
– Me duele, tu hermano ha hecho un desastre allá abajo- con sus dedos abrió un poco sus labios para que el lobo pudiera ver
como su interior también estaba hinchado y muy irritado.
Los orbes de Dixon se enfocaron en esa área y a pesar del estado en que ese encontraba la boca se le hizo agua, sobre todo
porque aún se encontraba húmedo y el olor de la excitación y la corrida de ella aun manchaba su piel. No pudo evitar bajar la
cabeza y dar un lametón en todo el sexo sensible
Clara jadeo y se estremeció de dolor y deseo en partes iguales, pero rápidamente cerró las piernas
Duele, duele se quejó.
costado del cuello de ella.
Sabe delicioso dijo con una sonrosa lobuno mostrando sus colmillos restregándole a su hermano que él había podido disfrutar
de aquello completamente
Dixon gruno de nuevo, algo que se estaba volviendo bastante habitual últinamente sobre Fondo porque fihan le encantaba
provocarlo, como ahora que sacó la lengua y lasnio pun Inca del juwhu dry ubierto de la loba estimulando el pezon
No. DATA Clara intentó alejarse dado que en ese nomento estaba muy sensible despres del 11084 mo y la lrngua de los lobos
era dmnasiulo áspera Sin embargo, los lobos numcall ulan, #yoende que o fruirla qimirabajar
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Bueno, en algo se estaban poniendo de acuerdo. Ya los dos eran consciente que pertenecía a los dos. Pensó Clara que se
estaba cansando de estar en el medio como una muñeca.
– Basta- ella se llenó de fuerza al perder la paciencia y alzó sus manos separando las dos grandes cabezas de ella. Juró que
necesitó bastante fuerza dado que esos dos lobos eran bastantes grandes y pesados en comparación con ella. Aprovechó que
ellos estaban bastante confundidos con su actitud para gatear alejándose de ellos lo más que podía. -Demonios con estos dos
malditos lobos- maldijo en un murmullo, con los dientes apretados, pero lo suficientemente alto para que los lobos la pudieran
oír. – No deberías expresarte de esa forma grosera de tus mates- aun cuando decía eso los ojos de Ethan estaban fijos en el
trasero de Clara que estaba todavía en la posición de gateo sin darse cuenta del espectáculo que les estaba dando a los dos
hermanos. 1 Ella chasqueó la lengua y bajó su espalda baja hasta sentarse sobre sus talones y los miró por encima del hombro.
-Y ustedes acaso me tratan como su mate- su tono era serio- No me escuchan ni siquiera cuando les digo que me duele.
Bestias. 1
Clara sentía que comenzaba a molestarse y tuvo que controlar que el pigmento rojo de sus ojos se volviera tan intenso que la
delatara. Cerró sus párpados unos segundos para abrirlos cuando se sintió siendo alzada. Soltó un chillido y se encontró sobre
el hombro de un cuerpo donde podía ver la ancha espalda y los glúteos redondeados y fuertes.
– Hablamos en la casa- la voz de Dixon se escuchó bajo aquel cuerpo y supo que era él – Y tu Ethan te quedas fuera de esto –
le gruñó- Yo necesito tiempo con mi mate. Y terminando esto comenzó a caminar con Clara cargada. Y ahí iban otra vez, la loba
teniendo que pensar en como lidiar con ellos. Algo que quizás no le gustaba a su otra parte, pero a ella, la divertía bastante..