Cariño eres multimillonario

Capitulo 176: La Sefiora Valentina Plensa en Usted

Valentina no podia sacudirse una extrafia sensacion, incluso sentada en el restaurante con su esposo. Después

de observarlo detenidamente, pregunté de repente:

-trajiste aqui a propésito?

Santiago parpaded, sus largas pestaiias temblaron ligeramente. Sabla que

lo habia hecho

intencionadamente, preocupado por lo que Carmen pudiera haber dicho, pero no podia permitir que Valentina lo

descubriera.

-¢A propésito? -preguntd Santiago, haciéndose el desentendido mientras cortabal meticulosamente su bistec-.

(Por qué harfa algo asi?

Eso era precisamente lo que Valentina no entendia. Recordando las palabras recientes de Carmen, no pudo

evitar reirse.

-Carmen, no sé qué la afectd, peropidié que rogara a Don Mendoza que perdonara a la familia Garcia. ;Qué

tengo yo que ver con los asuntos de Don Mendoza y la familia Garcia? Es

ridiculo incluso pensarlo.

Comparti6 la historia con su esposo como si fuera una broma. Santiago oculté una mirada de culpabilidad. Su

imagen en la mente de Valentina no habia mejorado, y se encontré defendiendo

su posicién.

-Don Mendoza debe ser también una persona compasiva.

-¢Compasiva?

Valentina no pudo evitar reirse. Santiago se tensé; no entendia su reaccion. Por qué dudaba de

su compasioén?

A pesar de su irritacion interna, Santiago sabia que no podia apresurar las cosas. Los prejuicios de Valentina

estaban profundamente arraigados; cambiar su opinion requeriria mas que

palabras, necesitaria acciones concretas.

De regreso en la empresa, Valentina descubrié que Carmen ya no estaba, pero recibié un

mensaje de ella:

[¢Sabes por qué Don Mendoza va contra la familia Garcia? jPor ti, Valentina! Aquella noche en el crucero,

convenci a Damian mientras estaba borracho. Asi que Don Mendoza acta contra la familia Garcia para vengarse

por ti.]

Valentina se quedé mirando su teléfono, aténita. Mas que por las acciones de Carmen, se

sorprendi6 al saber que Don Mendoza buscaba venganza por ella. ;Por ella? No podia creerlo, pero recordando la

noche en la Villa Valenzuela, cuando Don Mendoza prometid investigar el accidente de coche de su madre,

empez6 a dudar. jAcaso la vela como un reemplazo para Lucy, todavia guardando algln sentimiento por ella?

Valentina se sinti6 alarmada y tragé saliva nerviosamente.

-Por favor, Jesus, bendice a Don Mendoza para que encuentre a la persona que ama pronto.

Rez6 Valentina, juntando las manos en oracion. Crela firmemente que si Don Mendoza encontraba a su amor

verdadero, dejarla de prestarle atencién a ella. (Un reemplazo? Nada se compara con el verdadero amor.

Mientras tanto, en la oficina en lo alto del EdifiMendoza, Santiago estornudé repentinamente.

-Seguro que es la sefora Valentina pensando en usted -bromed Thiago, nunca perdiendo la oportunidad de

adular.

Efectivamente, la cara hasta ahora seria de Santiago se ilumind con una sonrisa. Tras recordar instrucciones

previas, pregunté:

-¢Todo arreglado con Carmen?

-Don, no se preocupe, la llamé personalmente para advertirle. Ella no se atreveréd a mencionar su identidad a la

sefiora. Ademas, le pedi que le revelara a la sefiora su intervencién para ajustar cuentas con la familia Garcia en

su nombre. Al saberlo, ella sin duda vera su imagen como noble y poderosa.

-iPerfecto!

Santiago estaba muy complacido. Esto era exactamente lo que queria. Con el tiempo, Valentina cambiarfa la

imagen que tenia de él.

Jugando con una moneda en su mano, Santiago estornudé nuevamente y sonrié atin mas.

-iElla estd pensando en mi otra vez! -murmurd para si mismo, sonriendo encantado.

Lo que Santiago no sabfa era que, mientras Valentina pensaba en Don Mendoza, su inquietud aumentaba. Temia

que Jesus estuviera demasiado ocupado escuchando otros deseos y no oyeral el suyo, asi que rez6 una vez mas,

esta vez al Dios.

...Mientras tanto, en la Villa Lancaster.

Tras enterarse de la bancarrota de la familia Garcia, Aitana no mostré gran alteracién. Hacia tiempo que habia

desechado la tarjeta con la que se comunicaba con Carmen y habia hecho que hackearan el mévil de Carmen

para borrar toda conversacion entre ellas. Asi que, aunque

Carmen y don Mendoza la acusaran, no habia pruebas para inculparla.

+15 BONOS

Lamentablemente, aquella noche en el crucero, Damian, bajo los efectos de un narcético, no logré consumar

nada con Valentina, lo que resultaba frustrante. Aitana, decepcionada, se tomé un vaso de leche mientras

recordaba el mensaje que le habla enviado la sefiorita Lucia Valenzuela dias atras.

-¢Fue Valentina elegida por don Rall solo porque sus ojos se parecen a los de su hija perdida? - se preguntd,

observando una foto de Valentina. Esos ojos, efectivamente hermosos, tenfan cierta similitud con los de la

seforita Lucia Valenzuela. Aitana, comparando sus propios ojos con los de Valentina en el espejo, pronto se

inundé de decepcién.

-iMaldicién! Por qué ella y no yo? -exclamé con ira, arrojando la foto al suelo.

En ese momento, Alicia entré al cuarto de Aitana y se encontré con la escena. Recogid la foto del suelo, y al ver

a Valentina en ella, una sombra de indiferencia cruzé su mirada.

-¢Qué haces con su foto? -pregunté su madre, arrojando la imagen a la basura.

Sin ocultar nada frente a su mama, Aitana inquirié.

-Mama, sabes por qué don Rall eligié a Valentina como su nieta?

-¢Por qué?

-jPor esos ojos! Por un golpe de suerte, tiene unos ojos parecidos a los de la hija desaparecida de don Rall, jqué

mala fortuna! -expresé Aitana, consumida por la envidia-. Por qué no yo?

Volvié a mirarse en el espejo, examinando sus ojos. No se parecian ni a los de Valentina ni a los de la sefiorita

Lucia Valenzuela. Alicia, por su parte, parecia perdida en sus pensamientos. Tras un momento, como si volviera

en si, agarré la mano de Aitana.

-Nifa, aclarame, los ojos de Valentina se parecen a los de la hija de don Raul?

Aitana asintié.

-¢Cuanto se parecen? -insisti6 Alicia.

-No sé, nunca vi a la hija de don Rall, pero si la eligié como nieta, deben parecerse bastante -

respondié Aitana, irritada.

Alicia parecia perturbada.

-Mama, ;qué te pasa? -pregunté Aitana, notando su camde actitud.

Alicia fruncia el cefio, pélida, con una sospecha en mente que no queria creer. Murmurd, casi inconscientemente.

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-Estrella Valenzuela, también de apellido Valenzuela-

Aitana la mir sorprendida.

-¢Estas diciendo que... Estrella Valenzuela es parte de la familia Valenzuela de Guadalajara?

Apenas acabé la frase, Aitana solt6 una risa frfa.

-¢Qué coincidencia, no? Hay muchas personas con el apellido Valenzuela, no significa que esa maldita Estrella

pertenezca a esa familia Valenzuela.

-¢Pero y la coincidencia de los ojos?

Alicia apret6 los pufios involuntariamente. No queria creer que Estrella fuera parte de esa familia. Sin embargo,

la semejanza en los ojos era innegable, y Estrella tenia un talento especial para la joyeria, habiendo construido y

expandido Starlight Joyas desde cero.

Aitana observaba la reaccién de su madre. Aunque rechazaba la idea, comenzé a considerar seriamente la

posibilidad. De repente, como si tuviera una epifanfa, pregunté:

-Mama, ;tienes alguna foto de Estrella?